Paseando por el valle de Geleenbeek

Los primeros metros se camina a lo largo de Mulderplas, una antigua zona pantanosa donde las minas estatales vertían el agua de enjuague contaminada que se utilizaba para lavar el carbón. En 1984 se limpió la zona, por lo que ahora se puede disfrutar de los hermosos bosques que rodean el lago. Un poco más adelante se atraviesa el valle con aspecto de parque de Geleenbeek. Al salir de Mulderswegske, verá a la izquierda la tradicional cervecería Alfa, una empresa familiar fundada en 1870. El sendero pasa luego por Krekelberg, una colina de poco más de 100 metros de altura. Aquí caminas a través de un hermoso bosque de hayas. En el lado oeste pasarás por la monumental capilla de María del año 1939. En la Brasserie De Muldermolen podrás disfrutar de una agradable bebida y un aperitivo.