Un pedazo de desierto en los Países Bajos

Aquellos que buscan la paz y la tranquilidad de la naturaleza pueden darse un capricho en Boswachterij Kootwijk. Esta parte de Veluwe sorprende con una inesperada llanura desértica de arena de unas 700 hectáreas, brezales y praderas donde el horizonte parece estar a kilómetros de distancia, así como los frondosos bosques que rodean el antiguo bosque de Garderen, Boeschoten. Se menciona ya en 1326 y era una de las fincas donde se cazaba en Veluwe. La ruta comienza en las afueras del pueblo de Garderen, en Veluwe, en De Beeldentuin. El jardín de esculturas es una verdadera atracción turística con cientos de decoraciones interiores y exteriores y una apariencia nostálgica. Puedes aparcar tu coche aquí de forma gratuita y echar un vistazo a esta exitosa empresa antes de subirte a tu bicicleta.