Esta ruta transfronteriza le llevará por el centro de
Limburgo y cruzará la frontera con Limburgo belga. Recorres hermosas reservas naturales que pertenecen al
Grenspark Kempen~Broek . En el camino, maravíllate con la flora, la fauna y las peculiaridades específicas que tiene cada reserva natural y disfruta plenamente de los tranquilos paisajes de las granjas.
Del espacio agrícola a la naturaleza
El recorrido en bicicleta comienza en las afueras de Vosseven, cerca del pueblo-iglesia de Stramproy. Desde aquí recorrerá en bicicleta varias zonas tranquilas del territorio holandés y belga, como la reserva natural de Wijffelterbroek, la reserva natural de Tungelerwallen, la reserva natural de De Goort y la reserva natural de Stramprooierbroek. Algunas de estas áreas se utilizaron durante un tiempo como zonas agrícolas y ahora se han convertido nuevamente en reservas naturales. Mantén los ojos abiertos mientras andas en bicicleta, porque aquí puedes ver todo tipo de animales. Pensemos, por ejemplo, en los castores y los tauros, pero también en las libélulas y las ranas. También pasará por un marcador fronterizo que data de 1800 y por molinos históricos a lo largo del camino.
Agradable charla
Al final de la ruta llegarás de regreso a Vosseven. Aquí podrá instalarse en Nieuw Vosseven, situado de forma natural. Disfruta aquí de un merecido snack y una bebida mientras charlas sobre tu viaje. Esta ruta tiene 39 kilómetros de longitud y es posible gracias a ARK Natuurontwikkeling en colaboración con VVV Midden Limburg.
Un pedazo de historia
El Doodendraad es un lugar especial para los amantes de la historia. Los alemanes instalaron este cable eléctrico durante la Primera Guerra Mundial en la frontera de los Países Bajos y Bélgica. De esta manera esperaban obtener un mayor control sobre Bélgica. En aquella época se realizaba mucho contrabando por esta línea de muerte, como alimentos, ropa, semillas e incluso personas.