Fort aan de Nekkerweg

Exactamente cien años después de la construcción en el Frente Norte, Fort aan de Nekkerweg comenzó una nueva vida como hotel y centro de bienestar. Los dormitorios donde estaban las literas de los soldados hace un siglo se han transformado en lujosas habitaciones de hotel. El contraste con la historia difícilmente podría ser mayor. En 1918, los objetores de conciencia fueron recluidos en las mismas habitaciones y, poco después de la Segunda Guerra Mundial, los miembros del NSB y otros colaboradores fueron encarcelados aquí en condiciones espantosas. A pesar de este cambio radical de función, la historia aún es visible en muchos lugares. Al conservar todos los materiales y detalles originales, aún se imagina en una sólida defensa militar.